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LA HISTORIA DE TÜNKERS

Empezar con productos especiales

En este contexto, se fabricaron los productos más diversos, como plataformas elevadoras hidráulicas para hornos de ascensores, máquinas desplazadoras para hornos de solera móvil, máquinas insertadoras para hornos de túnel, transmisiones de vigas de elevación y máquinas desplazadoras de tapas. Pero también sistemas completos como, por ejemplo, sistemas de limpieza de barriles, que a menudo llevaban la pequeña empresa al límite de sus capacidades y posibilidades.

Avance con productos en serie

Este avance se puso de manifiesto mediante la adjudicación de una oferta pública por parte del ejército alemán para un cilindro de bloqueo de eje. Este contacto fue la puerta de acceso al área de negocio de cilindros para vehículos de grúa y, posteriormente, de las bombas de hormigón. Los cilindros de la gama hidráulica, producidos en serie, formaron la primera columna vertebral importante de la joven empresa, que posteriormente amplió y alquiló nuevas instalaciones en la calle Neanderstrasse, la antigua fábrica de cajas fuertes de Adolphs.

A finales de la década de los 60, el contacto con FORD, Colonia, dio lugar a la entrada en la industria del automóvil. Se desarrolló una mordaza acodada accionada neumáticamente, que reemplazó los tensores manuales habituales. El tensor patentado fue uno de los primeros y más importantes componentes de automatización que agilizó la fabricación de carrocerías en el área de la automoción. Los tensores se convirtieron en otro pilar importante del Grupo TÜNKERS.


Contratiempos

El colapso del mercado de fabricantes de vehículos de grúas, así como la pérdida repentina de su cliente más importante, FAUN, hizo que la empresa cuestionara su estrategia. Se hizo evidente que la dependencia de un solo cliente o mercado podía amenazar la existencia a largo plazo de la empresa. También como respuesta a este recorte, en los años siguientes, el objetivo de la empresa fue estabilizar su posicionamiento en varios sectores, con varios segmentos de productos en diferentes industrias.

Los ingresos procedentes de la evolución positiva de los tensores neumáticos para la industria del automóvil se utilizaron posteriormente para abrir nuevos segmentos de productos. En 1975, mediante la adquisición de la división de máquinas de encolado y laminado de la empresa Jagenberg, tuvo lugar la entrada en la industria de procesamiento de papel. Posteriormente, este segmento de productos se amplió con la compra de equipos de laminado de la empresa Karma estableciendo, en ese momento, un nuevo e importante pilar de la empresa.

Debido al contacto con la industria de la construcción, la entrada en el campo de la ingeniería civil con hinca de pilotes mediante vibración fue todo un éxito. Casi al mismo tiempo, surgió el segmento de sillas de ruedas eléctricas como resultado de la cooperación con personas con discapacidad de Ratingen.

La expansión requirió el alquiler de instalaciones adicionales en el área metropolitana de Ratingen, inicialmente en la calle Lintorfer Straße y, más tarde, en Voisweg.

A finales de la década de los 70, la dispersión espacial en un total de tres ubicaciones diferentes nos llevó a plantearnos la posibilidad de combinar los diversos segmentos de productos en una ubicación central, en Ratingen. A principios de los 80, todas las unidades de negocios se trasladaron al nuevo edificio en Am Rosenkothen 8, formando así un grupo de empresas.

La expansión internacional de la industria del automóvil, especialmente en los años ochenta y noventa, dio un nuevo ímpetu a la división de tensores. Este desarrollo se vio reforzado por la expansión de la gama de productos con sistemas de punzonado, estampado y unión, y más tarde con sistemas de pinzas de robots, siendo su representante más relevante la pinza usada en la película de James Bond "Muere otro día".

Después de 2000, la expansión en los mercados extranjeros fue impulsada por el establecimiento de subsidiarias en, por ejemplo, Francia, Brasil, China y los EE.UU., y luego se complementó con la adquisición dirigida de empresas que coincidían con la gama de productos.

 

TÜNKERS hoy en día

TÜNKERS Maschinenbau GmbH es un proveedor de equipos de fábrica y, junto con sus filiales EXPERT-TÜNKERS en Lorsch, SOPAP en Tournes, Francia, TÜNKERS Ibérica / APM en Barcelona, España y HELU en Dreieich, ofrece una amplia gama de productos en el campo de los robots industriales en las áreas de sujeción, posicionamiento, desplazamiento, conformación, extracción, agarre, torneado, soldadura y transporte que caracterizan la tecnología de automatización en la construcción de carrocerías.

Los productos principales incluyen:

  • Mordazas acodadas que sujetan la carrocería durante el proceso de soldadura
  • Carros de desplazamiento y unidades articuladas que colocan y posicionan los conjuntos individuales en el dispositivo
  • Pinzas de punzonado y estampado que, por ejemplo, hacen agujeros para la antena o el riel del techo en la carrocería
  • Pistolas de soldadura por puntos, que conectan las partes de la carrocería, y sistemas de agarre, con los que el robot industrial agarra, manipula y posiciona el componente
  • Plataformas rotativas que posicionan transportadores y
  • transbordadores completos, con los que se transportan las carrocerías terminadas.


TÜNKERS hoy en día: unos 850 empleados distribuidos por nueve centros de producción, incluyendo Ratingen, cerca de Düsseldorf, Lorsch, cerca de Bensheim, Kingswinford (Inglaterra), Tournes (Francia), Barcelona (España), Sao Paulo (Brasil), Detroit (EE. U.), Shanghái (China), Pune (India), allí donde la industria del automóvil está fuertemente implantada.

Hoy en día, TÜNKERS sigue siendo una empresa familiar, ahora en la segunda generación, dirigida por el director general y fundador Josef Gerhard Tünkers y sus hijos Olaf Tünkers y André Tünkers.

Hoy en día, TÜNKERS sigue siendo una empresa que busca nuevos mercados y nuevos productos. Fiel al lema de la empresa "espíritu innovador como estándar", todos los días nace una nueva idea de producto y cada semana se desarrolla un nuevo producto. Esto está respaldado por más de 300 patentes en Alemania y en el extranjero, con las cuales se asegura el conocimiento del grupo.

Pero, hoy en día, TÜNKERS también es sinónimo de movilidad eléctrica. Porque, al igual que antes, se siguen produciendo sillas de ruedas, pequeños vehículos eléctricos para recoger carritos de equipaje en los aeropuertos y el MoVi, un pequeño vehículo que satisface los requisitos de movilidad del mañana en grandes fábricas, en aeropuertos o en las ciudades y que podrá convertirse en un nuevo pilar del Grupo TÜNKERS.